¿Por qué NO Es recomendable quitar un tatuaje durante el embarazo o lactancia?
¿Por qué NO Es recomendable quitar un tatuaje durante el embarazo o lactancia?
Cada vez más personas desean borrar tatuajes de su piel, ya sea por motivos personales relacionados con exparejas, o motivos laborales, entre muchos otros. Al igual que es cierto que cuando se toma la decisión de deshacerse de un tatuaje, entran las prisas y las ganas de querer borrarlo lo antes posible. He aquí la razón de este artículo, pues existen mujeres que están embarazadas y desean borrar un tatuaje lo antes posible.
En este post vamos a intentar resolver tus dudas a la hora de eliminar un tatuaje estando embarazada o en periodo de lactancia.
Al realizar un tratamiento láser para la eliminación de tatuajes el riesgo de tener una infección es mínimo, pero existe. Cada piel es única, diferente a la anterior, lo que conlleva a que, no todas se comporten de la misma forma ante el proceso de eliminar un tatuaje. Por ello, se hace imprescindible contactar con profesionales y especialistas en materia de eliminación de tatuajes.
▷ ¿Es recomendable quitar un tatuaje durante el embarazo o lactancia?
Definitivamente no
En general, se supone que las moléculas de tinta son demasiado grandes para pasar a la leche materna durante el proceso de tatuado. Una vez que se inyecta en la piel, la tinta queda atrapada. Sin embargo, se desconoce si la tinta al ser rota en pedazos más pequeños con el láser puede pasar a la leche materna, ya que se descompone lentamente en el cuerpo meses o años más tarde.
La energía del láser hace que el pigmento del tatuaje se rompa y se fragmente en partículas más pequeñas que son recogidas por el sistema inmune del cuerpo y filtradas a través del hígado.
El proceso de eliminación es largo, a menudo toma de 8 a 10 sesiones espaciadas por 4 u 8 semanas. Puede ser doloroso y causar ampollas y cicatrices.
Todos los profesionales especializados en tratamientos de eliminación de tatuajes con tecnología láser recomendamos que no se debe comenzar con este tratamiento.
Sean cuales sean las razones para eliminar / borrar el tatuaje, es necesario esperar y retrasar el tratamiento hasta aproximadamente 3 meses después de finalizar el periodo de lactancia.
Si tienes prisa por eliminar un tatuaje y estás embarazada, espera para comenzar el tratamiento y las sesiones.
Cuidar de tu piel y de tu bebé, es más importante que un tatuaje mal hecho, un tatuaje de un amor fallido o un tatuaje feo.
▷ ¿Que riesgos existen al borrar un tatuaje estando embarazada?
Es cierto que el riesgo que supone borrar un tatuaje estando embarazada no es el mismo que durante el proceso de hacerse un tatuaje. Sin embargo, ese riesgo existe, por muy pequeño que sea, está la posibilidad de que la piel reaccione de una forma diferente a lo habitual, o que la piel durante el proceso se infecte.
Principalmente el riesgo existente al eliminar tatuajes durante el embarazo se debe a la fotosensibilidad. Las mujeres durante el embarazo experimentan cambios en su cuerpo y estado de ánimo, además de otros aspectos como, una mayor sensibilidad de la piel ante la luz. De forma que, la piel de una mujer embarazada es más sensible y susceptible de reaccionar al láser del tratamiento de eliminación de tatuajes.
En definitiva, aumenta el riesgo de cicatrices, infección o pigmentación.
Si eliminamos un tatuaje en estado de lactancia, tenemos que saber que ocurre algo similar a cuando estamos en periodo de embarazo, la madre le podría traspasar al bebe mediante la leche, las partículas de tinta y con ello las sustancias químicas o metales pesados q estas conlleven.
¿Qué pasa si se infecta el tatuaje estando embarazada o en lactancia?
la especial sensibilidad que sienten en la piel las mujeres embarazadas, haciéndolas más sensibles a la luz, y por tanto más susceptibles a la posible acción del láser, pudiendo dejar manchas en la piel.
La no prescripción por parte de los médicos de antibióticos durante el embarazo o lactancia, hace que pueda existir un riesgo para la madre si la zona del tatuaje se infectara, porque la curación podría ser demasiado prolongada y peligrosa.
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