Tomar el Sol de forma saludable, La alergia al Sol

 

Tomar el Sol de forma saludable, La alergia al Sol

Si nos exponemos demasiado a los rayos solares, ello puede derivar en efectos negativos e irreversibles en nuestra piel tanto a corto como a largo plazo.

Tomar el sol de forma saludable es una de las cuestiones que más preocupan según se va a acercando el buen tiempo. Pues si nos exponemos demasiado a los rayos solares puede acarrear consecuencias negativas e irreversibles a nuestra piel tanto a corto como a largo plazo.

¿Es bueno tomar el sol en el rostro o es preferible evitarlo?

Sí, es bueno tomarlo, pero durante poco tiempo

 

Desde el grupo NutriDermoVital aconsejamos tomar el sol sin utilizar protección solar solo en determinadas ocasiones:

Exponer la piel al sol diariamente durante 10-15 minutos sin protección solar puede ser saludable para nuestra piel, ya que favorece la generación de la vitamina D.

Debemos tomar siempre el sol de manera continuada y durante poco tiempo.

*** Pero, si vamos a estar más tiempo expuestos (más de 10-15 minutos) es importante usar protección solar de amplio espectro tanto en el rostro como en el cuerpo, pero, sobre todo, evitar siempre que en el rostro los rayos incidan directamente.

Es importante recordar que No todas las personas tienen la misma respuesta a la luz solar, es decir no todos tienen los mismos riesgos de sufrir quemaduras solares, no todos se broncean, no todos desarrollarán cáncer de piel.

 

*** Es importante NO olvidar la protección de los ojos, para evitar las lesiones que las radiaciones solares son capaces de producir como conjuntivitis, cataratas, etc.

 

Pigmentación de la piel



El aumento de pigmentación de la piel después de la exposición a la luz solar o a la luz ultravioleta recibe el nombre de bronceado. Y se produce por la estimulación de unas células llamadas melanocitos que contienen melanina, pigmento que da color a la piel. El bronceado es un mecanismo natural de defensa contra los efectos perjudiciales del sol como las quemaduras solares, el fotoenvejecimiento y el desarrollo de cáncer de piel.

ALERGIA AL SOL

La "alergia al sol" hace referencia a un conjunto de afecciones cutáneas en las que la exposición al sol provoca que la piel se enrojezca y se originen manchas rojas acompañadas de picazón en la zona del pecho, los hombros, los brazos y las piernas.

La reacción más común se conoce como erupción polimorfa lumínica. En el caso de la alergia al sol, se cree que la radiación UV modifica la composición química de una sustancia de la piel, lo que provoca una respuesta inflamatoria acompañada de rojez y picazón.

Para prevenir la alergia al sol, se requiere de un bloqueador solar seguro testado en las pieles más sensibles. Hazte con una protección muy alta contra los rayos UVA y UVB, y rayos UVA largos, ya que los rayos UVA están especialmente vinculados a la alergia al sol.

Si ya se padece erupciones rojas acompañadas de picazón después de la exposición al sol, debes ser muy constante con la protección solar, aplicar diariamente un protector solar en el rostro y las partes del cuerpo expuestas al sol, y adoptar buenas prácticas con respecto al sol, como llevar sombrero, gafas de sol y ropa protectora, además de optar por la sombra cuando la radiación del sol es más potente.

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